Amigos de mis poemas...

sábado, 17 de marzo de 2012

María de los puertos.

La noche anciana
siembra mis sueños,
y en su seno,
la luna se desliza desnuda,
cubriéndose apenas de nubes
ondulantes como algas…

Volvemos a puerto,
el viejo que teje las redes
ya ve llegar la barcaza,
desde sus ojos acuosos,
mientras sigue labrando
las tramas del abismo.

En la bodega oronda,
otras manos bregan
con pieles gelatinosas,
órganos destripados,
peces sorprendidos
de estremecimiento.

Fuimos entrando
en la pequeña bahía,
azotados por las olas,
y cantando como locos
con un viento de popa.

...Solo un poco más,
y estaré inclinando el vaso
para escaciar un vino afable...

… un poco más,
para verte, para comprarte
esta noche de verano,
con su aroma a espirales encendidos,
y escuchar a las ranas
cantar un mantra al infinito…

… un poco más,
para morder tus labios carnosos,
y beberme a besos
tu cara de puta…

… un poco más,
para hundirme en tus brazos
y horadar tus orificios,
empapado en el sudor
de tenerte…

Otra vez,
pienso dormirme borracho
sobre tus pechos tibios,
los he soñado
en alta mar,
suspendido en el oleaje
de tu respiración…

Eran sueños de sed,
igual que tu,
me abandonaban
con las primeras luces
de la madrugada…

... Solo un poco más,
para un sueño
que se me escurrirá
entre los dedos
como un pez,
lo sé…

... un poco más,
y será de nuevo imposible
apoderarme de ti;
eres agua sin dueño,
como el mar abierto,
y a cualquiera te entregas
María de los puertos…


Mauricio Escribano.
 




No hay comentarios:

Publicar un comentario